UN MUNDO SIN QUEJAS
Cambia la forma de ver las cosas, y las cosas cambiarán la forma.
Si algo no te gusta, cambíalo.
Si no puedes hacerlo, cambia la actitud: Y NO TE QUEJES.
Lo único que ganamos en quejarnos, es sentirnos cada vez peor.
Quejarnos se ha convertido en una pandemia.
¿Has notado que siempre hay algo de qué quejarse?
Si no es el clima, es el tránsito, la inseguridad en las calles, las mentiras de los políticos, la salud, el dinero que no alcanza, etc.
Cuando criticamos, nos quejamos. Cuando juzgamos a alguien, estamos emitiendo una energia discordante. Esta energía, por la Ley de la Atracción, será devuelta a nosotros pero multiplicada
Además, alimentamos aquello de lo que nos quejamos y lo hacemos más grande.
Con la queja, te conectas a campos morfo genéticos de baja energía, que te debilitan, haciéndote más vulnerable a enfermedades, conflictos y carencias.
Por el contrario, con la GRATITUD te conectas a campos morfo genéticos de mayor energia en los niveles en que el poder personal se desarrolla.
En Julio del 2006 Will Bowen propuso a su comunidad “el reto de los 21 dias”, con el propósito de ayudar a eliminar cualquier rastro de queja o lamento y sus nocivas consecuencias para el individuo.
Su propuesta fue muy simple: los participantes debían colocarse una pulsera morada (o cinta) con el escrito de “UN MUNDO SIN QUEJAS” y mantenerse durante 21 dias sin emitir ningún de queja o crítica, ya sea:
“me duele la cabeza”, “nada me está saliendo bien”, etc.
Si durante este período los participantes emitían algún lamento, debían cambiase la pulsera muñeca y empezar de nuevo.
La mayoría de los participantes logró superar el reto, pero en un mínimo de 5 meses, un tiempo que evidencia la presencia de la cultura de la queja en nuestras vidas.
Este reto cambiará tu vida y la de tus semejantes, por lo que te harás de tu vida un paraíso sin enfermedades. Tendrás:
. mejor ánimo
. menos dolores
. mayor autoestima
Serás una persona más feliz y armoniosa.
¿Crees que puedes aceptar el reto?
6 millones de personas lo han logrado desde que en 2006 el Pastor Will Bowen lanzó la campaña en Estados Unidos. Cada dia se suman más personas a este reto para lograr un mundo mejor.
Muchas personas que decían no quejarse demasiado, se dieron cuenta de que lo hacían un promedio de 20 veces al dia.
La propuesta es que, desde este momento, en que te pongas la pulsera, asumas el compromiso de dejar la queja y la reemplaces por la GRATITUD, así como mantente observando tus pensamientos y palabras y, cada vez que descubras quejándote, expresa un agradecimiento a la vida, al trabajo que tienes, la salud o cualquier cosa que puedas agradecer de corazón.
Cada vez que emitas una queja, tendrás que volver a empezar la cuenta de los días, desde el primero.
Y aquí viene este pregunta:
El pensar en una queja o crítica ¿también cuenta?
Pues NO, por suerte NO cuent. Solo las palabras que salen de tu boca son las que cuentan.
Quienes lo han logrado, reconocen que no es para nada fácil, pero después de las tres semanas o más, que tarden en lograr su meta, dejan incluso de criticar por la mente.
Adelante pues, acepta el reto de que SÍ puedes, y vive la GRATITUD como una experiencia que se siente y asciende a un mayor nivel de conciencia y despertar, donde el panorama de la vida será más amplio y armónico.
Si no tienes algo morado, utiliza lo que te resulte más cómodo de llevar. Puede ser una piedra en un bolsillo y , si te quejas, ponerla al otro bolsillo, etc.
La importancia es darnos cuenta de que nos quejamos, permitiéndonos tomar conciencia.
¿Por qué 21 dias?
Los científicos nos dicen que nos toma 21 dias crear un hábito y, como quejarnos es habitual para la mayoría de nosotros, nos tomará 21 dias dejar ese hábito por uno nuevo : la GRATITUD.
Quejarse no debe confundirse con la crítica constructiva, a través de la cual le haces saber a alguien que ha cometido un error o que tiene alguna deficiencia que puede mejorar.
Abstenerse de quejarse, no necesariamente significa tener que soportar malas conductas o actitudes hacia ti.
No hay nada malo en decir al camarero “la sopa está fría, ¿puedes calentarla?.
Sin embargo si dices “¿Cómo te atreves a traerme la sopa fría? Eso es quejarse.
SÚMATE A UN MUNDO SIN QUEJAS, COMIENZA YA.
Namasté.
Victoria J. Furafoc
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